Quienes convivimos con gatos sabemos que no solo son animales de compañía, sino auténticos miembros de la familia. Con su carácter independiente, sus ronroneos y esa forma tan suya de pedir mimos, consiguen llenar de calma cualquier rincón del hogar. Pero, como todo ser querido, también necesitan cuidados especiales para mantenerse sanos y felices.
Uno de esos cuidados es protegerlos de parásitos como pulgas, garrapatas o mosquitos, que no solo resultan molestos, sino que también pueden transmitir enfermedades. A mi gata Luna le gusta salir al exterior por eso siempre procuro mantenerla protegida.
Hace un tiempo empecé a usar las pipetas repelentes naturales para gatos, y la experiencia no ha podido ser mejor. Me gusta especialmente que sean 100 % naturales, sin insecticidas químicos, ya que así cuido su salud y evito posibles irritaciones en la piel. Además, tienen una acción prolongada, ofreciendo hasta 1 mes de protección frente a garrapatas, pulgas y mosquitos.
Aplicarlas es muy sencillo: basta con abrir la pipeta y colocar el contenido sobre la piel, en la zona del cuello y entre los omóplatos, para que el gato no pueda lamerlo. En cuestión de minutos, el producto se absorbe y empieza a actuar. Lo mejor es que no deja residuos grasos ni olor fuerte, algo que agradezco mucho, porque Luna es bastante sensible con los olores.
Desde que las uso, he notado que Luna está tranquila y libre de picaduras, incluso en los meses de más calor. Saber que está protegida de forma natural me da mucha tranquilidad. Y, sinceramente, me encanta que existan alternativas respetuosas con los animales y el medio ambiente, sin perder eficacia.
Si tienes gato, te recomiendo usar pipetas repelentes naturales. Son una opción segura, práctica y con resultados visibles desde las primeras aplicaciones.
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